No importa cómo lo llamen -retrete, excusado, poceta- este aparato fundamental en el hogar es uno de los inventos más útiles e ingeniosos de la modernidad. A pesar de ser elemento esencial en la higiene, para más de 40% de la población mundial es un lujo inalcanzable. Bill Gates está consciente de su importancia y por eso, a través de su fundación, ha lanzado el reto de buscar el trono perfecto: ecológico, cómodo y barato.
Y está dispuesto a invertir hasta 340 millones de dólares.
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El intrépido Capitán Pánico