
Menachem Zivotofsky tiene 12 años, nació en Jerusalén y tiene el potencial de afectar la política exterior de una potencia como Estados Unidos, pero ¿cómo? El niño tiene nacionalidad estadounidense y sus padres, Ari y Naomi, buscan que en su pasaporte, bajo el país de nacimiento, aparezca el nombre de Israel. Aunque Israel considera a Jerusalén su capital, la Casa Blanca asume que la soberanía de esta ciudad sagrada para los cristianos, los musulmanes y los judíos no corresponde a ningún país y su estatus debe ser negociado como parte de un acuerdo de paz. El análisis en BBC Mundo
Colombia: ¿habrá paz? Next Post:
Más espacios para la marihuana