Referendos, elecciones, proyectos legislativos… son todos términos que asociamos con la democracia. Pero estamos viendo una preocupante tendencia: las herramientas democráticas se están convirtiendo en herramientas para concentrar el poder y limitar la libertad de los ciudadanos. Y Andrea Kendall-Taylor nos revela por qué el personalismo está en auge y cómo esto atenta contra la democracia a nivel global.
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