
“La sátira de Charlie Hebdo, su sarcasmo, su burla —del Islam y de otras religiones por igual— es la misma burla que uno puede leer en la crítica de una película aburrida, de un libro mediocre o de una exposición de pintura poco estimulante. Simplemente se trata del derecho a rechazar verdades reveladas”, escribe Héctor Schamis en su artículo sobre “las palomas y los halcones” de la libertad de expresión. Plantea el dilema de los musulmanes en Europa: disfrutar de las libertades del sistema, pero pretender imponer restricciones al prójimo. Interesante para un debate en El País
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