Ni autos, ni fábricas, ni grandes estructuras. Nos movemos hacia una economía valorada en activos que no se pueden ni ver, ni medir, ni tocar. Y esta gran transformación tiene enormes consecuencias políticas y sociales. De la mano de los economistas británicos Jonathan Haskel y Stian Westlake, exploramos el triunfo de la llamada economía intangible.
Vacaciones bajo el mar Next Post:
El doctor del mundo